Esta extraña historia viene bien como
introducción para el libro que está escribiendo mi hijo, y que de momento ha
titulado La Frigiliana mágica, donde
cuenta con pelos y señales la historia del condado de Frigiliana, su nobleza, aristocracia,
y su final por intereses económicos.
Texto:
La hoy llamada Fuente Vieja se llamó en su origen Fuente Nueva, la mandó
construir el I Conde de la Frigiliana D. Íñigo Manrique de Lara en 1640. El título
de Conde que se le concedió por un privilegio del Rey Felipe IV el 31 de
marzo de 1630. D. Íñigo era biznieto homónimo del Señor de Frigiliana D. Iñigo
Manrique de Lara nacido en Málaga (1591-1654), de donde fue alcaide de Málaga
en 1608. Se casó con Margarita de Menezes Sousa, hija del Gobernador del Brasil
y tuvieron cinco hijos.
El historiador Antonio Uribe, es autor de un
libro sobre los pleitos de la villa de Alhaurín y el Conde de Frigiliana,
suceso ocurrido el 12 de mayo de 1632
(dos años antes había sido nombrado Conde de Frigiliana), quiso comprar la
villa Alhaurín a la monarquía, al rey Felipe IV, que estaba en banca rota debido las
guerras en Europa, el Consejo de Alhaurín no quiso vender la villa a Don Íñigo porque no
era vecino aunque poseía importantes tierras de labor en el municipio. Al final
el Consejo de la villa ganó el pleito y lo compró a la monarquía por cuatro
millones de maravedíes, sin tener ese dinero, para lo cual tuvo que pedir unos
préstamos a capitalistas de Antequera y Córdoba para pagar el préstamo se vio
obligado a subir los arbitrios municipales aprobados en concejo abierto sobre
el aceite, vecino, carnes…, ante la discrepancia de algunos vecinos y del
propio Conde que tenía que pagar, injustamente 10.000 reales al años. De parte
del Conde estaba el cura Pedro Hurtado de Aguilar, ante la oferta del Conde
en lograr algunos beneficios a través del Obispo. El segundo pleito fue
mucho más complejo. No ganó ninguno de los dos. El Concejo de Alhaurín tardó 65
años en pagar al Consejo de la Hacienda Real, con la consecuente ruina y
despoblamiento. Es decir que más le hubiera valido al Concejo de Alhaurín que
el Conde se hubiera quedado con la jurisdicción, y de este modo, la vida de los alhaurinos,
hubiera cambiado a mejor como hizo en Frigiliana.
En
1640 el I Conde de Frigiliana ayudó económicamente a los vecinos de Frigiliana
a comprar la jurisdicción a Vélez-Málaga, para que se independizara de ella.
Año de la construcción de la Fuente Vieja.
El nombramiento real del
condado a Don Íñigo Manrique de Lara se debía a todo las mejoras que hizo
por Frigiliana:
“…hizo fabricar nuevas casas, llevó
vecinos [cristianos viejos], plantó cañas, y estableció trapiche para ingenio
de azúcar, solicitando por este medio, que cultivándose las tierras, que eran
de su Casa, en aquel término, y en el de Nerja, volviéndose aquel lugar a ser
habitado, y su vecinos tuviesen comodidad para mantenerse en él, e hiciesen por
aquella parte más seguras la costa contra la continuada inquietud de los
cosarios africanos”.
(Antonio Uribe, Los pleitos entra la villa
de Alhaurín el conde Frigiliana. Diputación de Málaga 2006 pág., 27)
La población de Frigiliana estaba muy
agradecida al Conde por su actitud de mejorar la vida de y progreso de los frigilianenses
o “aguanosos”, en cambio, los vecinos de Alhaurín se opusieron a todo progreso.
Los castillos y las torres de vigilancia
costera se habían construido durante los reinados de Carlos I y Felipe II, estos
ordenaron que su mantenimiento fuera con soldados y alimentos que corrían
a cargo de los concejos municipales donde estaban ubicadas. Así las torres que
defendían la costa más próxima a Frigiliana eran las de Torrox: Río Huit y
Caletas. Las de Nerja: Macana, Torrecilla, Castillo Bajo, Maro, Arroyo de la
Miel, Pino y Caleta (dependientes de la jurisdicción de Vélez-Málaga).
Al parecer, por el relato antes anotado, el Conde de Frigiliana contribuyó al
mantenimiento de las mismas y así asegurar sus dominios y favores reales.
En 1640 Don Iñigo fue nombrado Corregido de Badajoz, cuatro años
después Gobernador de Cádiz. El palacio de los Conde que es actualmente
el Ingenio de la Fábrica de miel caña de la familia de la Torre, es de estilo renacentista, ocupa una superficie de
más de dos mil metros cuadrados, se dice que se construyó, en parte, con
materiales procedentes de lo que quedaba del destruido castillo árabe de
Lízar situado en el Peñón donde sucedió la batalla de Frigiliana de 1569.
Solo han quedado 4 metros de la
antigua muralla.
Antes de condado fue señorío, concedido por los
Reyes Católicos a Garcí Fernández Manrique por su colaboración en la Guerra de Granada, y fue
designado primer Alcaide y Comendador de Málaga en 1487. Con esta posición
privilegiada, los Manrique fueron acumulando propiedades en toda la
provincia, por donaciones reales o compras.
En su origen, tras la llamada “reconquista”,
por no decir invasión del reino nazarí de Granada (Málaga, Granada y Almería),
Frigiliana fue conquistada en 1485, dos años antes de la rendición de Vélez-Málaga
en 1487 tras dos varios años de asedio,
las tierras de Frigiliana pasaran a formar parte de la jurisdicción de
Vélez. Tres años después 1490 los Reyes Católicos la vendieron junto con las
de Nerja y Maro al judío malagueño Maimón Leví. En la
provincia de Málaga habían entrado
de 5.000 y 6.000 cristianos extremeños,
leoneses, castellanos, gallegos y levantinos para los repoblaron la provincia.
El 2 de enero 1492 el rey
granadino Abu Abdalá (Boabdil) entregó las llaves de la ciudad de Granada a
los Reyes Católicos, que había apropiado del último reino musulmán en la
Península Ibérica.
Por la Provisión Real de los Reyes
Católicos, concedida el 31 de diciembre de 1490, daba la facultad a Garcí
Fernández Manrique de Lara para fundar un mayorazgo a favor de su hijo, Iñigo
Manrique de Lara. Finalizada la reconquista, los Reyes Católicos
concedieron el término de Frigiliana a Íñigo Manrique de Lara (….-Granada
1530), hijo de Garcí Fernández Manrique de Lara, por cédula real el 26 de
enero de 1508, como señorío de Frigiliana. Por lo que suponemos que tras la
expulsión de los judíos, Maimón Leví, perdió su compra. Hubo tres
señores: Íñigo, su hijo, Rodrigo y su hijo Luis. El escudos de los
Manrique de Lara tiene tres calderos con serpientes, signo de abundancia, rodeado
de un collar con leones y castillos, en el cuarto inferior izquierdo las
cadenas de navarra, y en el resto flores de lis como asociación a la casa de
Francia y a los Borbones desde Felipe V. (El escudo del Ayuntamiento de
Frigiliana conserva los calderos con serpientes, y debajo montañas y un
castillo lateral levitando que significa
ya no existe).
El II Conde de Frigiliana fue Rodrigo Manuel Fernández Manrique de Lara (1638
- 1717), fue un militar e importante
hombre de estado español, ascendió a teniente coronel, fue gentilhombre de
cámara de Carlos II, en la regencia de
María de Austria formó parte de la Junta de Gobierno que actuaría hasta la
llegada del nuevo rey Felipe V, Duque de Anjou, de la familia de los Borbones
de Francia, el nuevo rey no se olivó de D. Rodrigo y le nombró gobernador del Consejo de Indias,
permaneciendo en este cargo hasta su muerte.
El propietario de las tierras del
condado de Frigiliana, era Don Manuel Falcó
y Álvarez de Toledo (1897-1936, asesinado en Madrid), IX marqués de la Mina,
V Duque de Fernán Núñez y VI duque del
Arco, conde de Cervellón, hizo escritura de venta el 26 de junio
de 1930, a la sociedad “De la Torre, S.A”, representado por Manuel de la
Torre Herrero Acosta. En la venta se incluía el palacio y el ingenio
azucarero y la Sierra de Frigiliana de 2.500 hectáreas, por la cantidad de
130.000 pesetas, pero no los títulos nobiliarios. Propiedades de las que
antes fueron arrendatarios. Las negociaciones duraron dos años. Manuel Falcó
era hermano de María Cristina Falcó la
VII condesa de Frigiliana, que le venía por vía materna.
Posiblemente esta venta se debió a la
necesidad de disponer de liquidez Manuel Falcón para casarse con la señorita
argentina Mercedes Anchorena y Uriburu en la iglesia de Saint Honoré de Eylau
de París en julio de 1931. El padrino fue el Duque de Alba en representación
del rey Alfonso XIII. La madrina fue la madre del novio Silvia Álvarez
de Toledo y Gutiérrez de la Concha, viuda del IV duque de Fernán Núñez,
muerto en 1927 que era Manuel Felipe María Falcó y Osorio d'Adda, y que
ostentaba entre otros muchos títulos el de Conde de Frigiliana, el de VIII Marqués de
la Mina y el de Fernán Núñez y otros títulos. Cómo fue posible que tanta
aristocracia y tanta miseria pudieran cohabitar juntas.
Y así fue cómo con la venta del palacio y de
las tierras de la Sierra de Almijara acabó la aristocracia para pasar a una
burguesía local. A pesar de que el condado no existe los titulo nobiliarios
continúan, pues creo que ya va por XI conde Frigiliana que creemos vive en
Bilbao.
El escudo que perteneció a los Montellano
porque hubo un matrimonio de Alonso Vicente de Solís y Folch de Cardona IV
duque de Montellano con María Augusta Wignacourt Arenberg y Manrique de Lara,
IV condesa de Frigiliana. Sucesores en el
condado de Frigiliana, cuyo título data de 1705 campeó en la fachada del
Ingenio azucarero. Hace pocos años, la "Sociedad de la Torre" donó
el escudo al Ayuntamiento y fue
colocado en el frontón de la fuente ubicada en la calle Real.
.........................
Chile
Argentina Alemania Francia Combia Perú |
Obra narrativa: "El cazador del arco iris"
No hay comentarios:
Publicar un comentario